NUEVA YORK – Carmelo Anthony recuerda cómo años atrás también fue un muy elogiado prospecto seleccionado entre los primeros cuatros del sorteo y cómo tuvo que crecer de un día a otro y afrontar lo que le esperaba en la NBA con tan sólo 19 años de edad.
Al igual que Jahlil Okafor, el asediado estelar de los Philadelphia 76ers, Anthony tuvo poco tiempo de preparación en el sistema del baloncesto universitario, pasando por una temporada en Syracuse University, a quienes dirigió a su primer y único campeonato nacional.
La estrella de los New York Knicks vio a Okafor jugar en la Gran Manzana el año pasado y ansiosamente anticipaba su primer choque con el joven que muchos proyectan ser el jugador franquicia de los 76ers.
No obstante, Anthony arribó al Madison Square Garden la tarde del miércoles, enterándose pocas horas antes del juego que el peor conjunto de la liga había suspendido a Okafor por dos partidos luego de que surgieron más detalles tras haber tomado parte en una pelea afuera de una discoteca en Boston la madrugada del jueves pasado.
Por su bien, Anthony nunca ha sido vinculado con ningunos problemas fuera de la cancha durante sus 13 campañas en la liga, pero comprendió la terrible situación en la cual Okafor se encontraba y le ofreció una mano de apoyo a un compañero que apenas lleva cinco meses de membresía en la mejor liga del mundo.
“En la situación de Okafor, es fácil que la gente le de la espalda en este momento, especialmente él siendo tan joven, el equipo no está teniendo éxito (y) ellos están perdiendo partidos”, aseveró el ocho veces Todo Estrella tras la conclusión de la paliza de 99-87 que los Knicks les propinaron a Philadelphia.
“Así que es mucho lo que podría estar pasando por su ente. Me encantaría hablar con él y decirle que todo va a estar bien. Sólo que lo supere”.
Elegido en la tercera plaza del NBA Draft de 2003, Anthony se incoporó a una escuadra de los Denver Nuggets, cuyo plantel contaba con la presencia de ocho jugadores que tenían más de cuatro años de experiencia, incluyendo tres de ellos que habían militado por más de siete campañas.
Sin embargo, Anthony se encargó de tomar las riendas de su propio futuro y aprendió por las buenas y las malas a lo largo de una temporada en la cual logró clasificar a la postemporada.
“Llega el momento cuando tienes que sentarte y tener tu propio tiempo y en verdad averiguar lo que quieres de tu vida, de tu carrera”, continuó el veterano de ascendencia puertorriqueña. “Hay algunas personas aquí y allí con las que he hablado, me dieron consejos o me pude desahogar con ellos, pero por la mayor parte he tenido que lidiar con todas mis experiencias por mi cuenta”.
Okafor pudo haber sido seleccionado por los Knicks si Philadelphia no lo hubiera hecho su tercera selección. Nueva York entonces apostó y hasta al momento no se arrepienten haber tomado al internacional letón Kristaps Porzingis en la cuarta plaza del sorteo.
El joven de 20 años se puede apoyar en las enseñanzas de seis compañeros que llevan por encima de siete temporadas en la liga.
“No puedes agarrar las manos de estos chicos y caminarlos por el día a día de la vida. KP tiene la suerte de tener jugadores veteranos en este camerino que les pueden hablar o enseñarles cosas aquí y allí, aprender de ejemplo”, dijo.
“Es una situación desafortunada. Podría haber sido cualquiera. Acaba de suceder que fue él”, agregó. “Él está tratando con eso. Me siento mal por él porque sé que conozco esas situaciones. A veces uno no puede controlar esas situaciones”.
ADRY TORRES
ESPNDEPORTES.COM
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